El desarrollo regional genuino y sustentable es un proceso de construcción colectiva donde la comunidad regional es la protagonista. Como todo proceso de construcción colectiva requiere de líderes que combinen virtuosamente el despliegue de sus capacidades personales con el trabajo en equipo coordinado y sinérgico. En este camino endógeno del desarrollo, la comunidad regional toma en sus manos su presente y futuro y, lo gana, proyecto a proyecto. Las necesidades o aspiraciones se consiguen con proyectos concretos. El lenguaje de la inversión y el desarrollo es el lenguaje de los proyectos. La región y sus comunas deben definir sus prioridades y transformarlas en proyectos técnicamente factibles y socialmente rentables. Decimos que es un proceso que se gana, porque se trata de un proceso competitivo en que las distintas comunas y regiones compiten con sus proyectos por los siempre escasos recursos.
Algunas características claves para un desarrollo regional endógeno exitoso:
Visión. Para cambiar el presente por un mejor futuro, como comunidad regional debemos tener un sueño inspirador positivo que nazca y se retroalimente en nuestras fortalezas objetivas para, desde allí, salir a conquistar nuestras oportunidades y dejar atrás nuestras debilidades o penurias.
Pasión. El fuego en los ojos y en el corazón, en el trabajo del día a día, es la forma de vida indispensable para la creación del valor extraordinario que requiere la construcción de una nueva región. Sin pasión no pasa nada extraordinario. Este es el optimismo constructor y de aporte creativo que pone el foco en las oportunidades para la creación de nuevo valor para la comunidad.
Proyectos Estratégicos. Una región ganadora debe estar armada de una sólida cartera de proyectos estratégicos evaluados técnicamente y socialmente rentables. La realidad nos muestra pocos y débiles proyectos para el día a día (reposición, mantención, equipamiento rutinario, etc.). Se requieren aquellos proyectos estructurales que construirán la nueva realidad, aquella que está definida en la visión futura de la educación, salud, desarrollo productivo, transparencia, probidad, seguridad ciudadana, esparcimiento, cultura, etc.
Organización. Los líderes regionales, en la práctica, deben actuar coordinadamente. La confianza, el apoyo y conversación recurrente es la herramienta que les permitirá ir construyendo los consensos y la división del trabajo en torno a los proyectos estratégicos.
Gestión, La experiencia demuestra que no bastan los buenos proyectos para construir la nueva región. Siempre existen fuerzas que se interponen y retardan el avance, por esto es indispensable la acción coordinada que, desde distintos frentes y niveles, se moviliza y gestiona el avance en torno a los proyectos estratégicos.