- El Instituto de Tecnologías Limpias, ITL, contará con una inversión de 180 millones de dólares, transformando a la región en un polo de vanguardia tecnológica a nivel nacional.
“El ITL busca que podamos desarrollar proyectos de gran y mediana envergadura, pero también de baja envergadura en términos monetarios, pero trascendentales para generar encadenamientos locales y cobertura a nivel regional”, destacó Víctor Pérez, Director Ejecutivo de la Asociación para el Desarrollo del Instituto de Tecnologías Limpias, ASDIT, en el encuentro que sostuvo el Instituto de Tecnologías Limpias, ITL, con los proveedores de la minería y energía de la Región de Antofagasta.
La instancia tuvo como propósito dar a conocer la propuesta de valor que el ITL dispondrá para los proveedores de la minería y energía, resolviendo dudas y entregando información relevante para el desarrollo de futuros proyectos, que consoliden al país como líder mundial en minería verde, con desarrollo local.
Fernando Cortez, Gerente General de la Asociación de Industriales de Antofagasta, AIA, gremio que organizó el encuentro, manifestó la importancia del mismo al señalar que “ el ITL busca llevar adelante proyectos de investigación aplicada que involucren, de manera importante, a actores regionales y particularmente a empresas proveedoras que forman parte de la cadena de valor, de la industria minera y energética”.
Los asistentes valoraron la iniciativa, ya que tuvieron acceso a información relevante y la oportunidad de diálogo directo. Karla Vergara, Jefa de Finanzas y Administración de Andina Montajes, comentó que “me parece super bien que se distribuya la información y podamos participar, como empresas proveedoras, e informarnos en qué consiste el proyecto en general”.
“Es una oportunidad espectacular que podamos ver, en directo, el efecto que está produciendo el ITL en nuestra región y nosotros, como empresarios, tengamos las oportunidades de desarrollo conforme a la demanda que tiene tanto la minería como la energía”, compartió Patricio Lazcano, Gerente de Impulsa.
Con una inversión de US$180 millones, el ITL forma parte de la estrategia nacional para el desarrollo de tecnologías limpias, que permitan alcanzar la carbono neutralidad al año 2050. “Sin el apoyo de proveedores locales no va a ser posible la carbono neutralidad, más del 50% de las emisiones de la huella de carbono, del mundo minero, está radicada en la cadena de valor de productos y servicios”, precisó Pérez.
Tecnologías centradas en el desarrollo de hidrógeno verde, almacenamiento energético y economía circular son los pilares bajo los que se estructurará el ITL en la región, promoviendo la cooperación y también la competencia de diversos pilotos tecnológicos e industriales, que capturen el valor agregado por el instituto.